Ensamblaje de telar reúne once piezas textiles realizadas entre 2024 y 2025. Cada obra presenta una estructura de capas ensambladas que dialogan entre sí, generando volúmenes, vacíos y tensiones que remiten a ecosistemas naturales.
Inspiradas originalmente en los quipus andinos, estas composiciones han evolucionado hacia un lenguaje propio, más cercano al imaginario del artista y a las formas vivas de la naturaleza. El textil deja de ser superficie y se convierte en arquitectura del gesto, portador de símbolos y memoria ancestral.